Si tienes un nuevo auto o simplemente vence la póliza de tu seguro, puede que te estén planteando cambiar. De hecho, incluso si no te planteas cambiar, no estaría de más que comparases precios y coberturas, ya que quizá estés pagando de más sin saberlo. Sea como sea, informarse sobre las opciones que hay en el mercado siempre es positivo. Para que puedas hacerlo mejor, en este artículo te ofrecemos varios consejos para comprar tu seguro de automóvil en Chicago, Il.
1. Un seguro que cumpla con la legalidad
Puede sonar obvio, pero si vas a conducir en Chicago o Illinois, necesitas un seguro que cumpla con los requisitos de esta zona. Por el momento, las coberturas mínimas que debe ofrecer un seguro en Illinois son:
- 25.000 $ por daños personales a una persona
- 50.000 $ por daños personales en total
- 20.000 $ por daños a la propiedad
Además, si vas a dejar manejar a alguna otra persona, el seguro debe cubrir daños personales hasta una cantidad de 25.000 $ y hasta 50.000 $ en daños totales por accidente, en el caso de que la persona que maneje tu auto no tenga seguro o tenga un seguro insuficiente según las exigencias de las regulaciones de Illinois.
2. Compara precios y coberturas
Una vez tienes claros los mínimos que necesitas, llega el momento de comparar precios y coberturas. En ocasiones, con lo que pagas en una compañía, puedes disfrutar de una cobertura mucho mayor en otra.
Si no quieres perder tiempo investigando las compañías una a una, puedes consultar en donde trabajan con más de una veintena de compañías reputadas y experimentadas. Por supuesto, todas ellas ofrecen coberturas que cumplen con los requisitos del estado de Illinois.
3. No contrates de más
Si bien es importante conseguir una buena cobertura, también lo es ser razonable. Si tu auto es muy antiguo, por bueno que sea el precio no te merecerá la pena una cobertura muy amplia y, seguramente, lo más razonable sea conformarte con la cobertura mínima.
Sin embargo, si tu auto es nuevo, una cobertura a todo riesgo puede aportarte la tranquilidad que quieres tener.
En este sentido, piensa en si vas a usar mucho el auto, lo importante que es para ti, cuánto te afectaría no disponer de él y cuánto te resulta asequible pagar por su seguro.
